Soy un gran aficionado al montañismo y senderismo. Bueno, en general a todos los deportes con cuerdas. Casi siempre vamos un grupo de amigos, pero en ocasiones somos mi amigo Hugo y yo los que nos decidimos a hacer rutas. Y durante una de esas escaladas que realizas, cuando te sientes el rey del mundo, a mi compañero se le ocurrió preguntarme “¿por qué se le llamará cuerda?”. Al principio me quedé como los conejos cuando se les da las luces largas en la carretera, posteriormente me eche una risa y le contesté: “Pues la verdad no tengo ni idea, pero pienso mirarlo y te responderé”.
- Y dicho y hecho. En la siguiente ruta que hicimos por Almería, por cierto hay zonas muy buenas para escalar, aunque son muy desconocidas. Tenía preparada una respuesta para él. Cuerda es un término que procede del latín chorda, aunque su origen etimológico más lejano se halla en la lengua griega. Una vez más se demuestra que cuando se estudiaban estas dos lenguas en Bachillerato, en el ya lejano Bachillerato, servía para algo. El concepto se suele utilizar para nombrar a la herramienta formada por la unión de diversos hilos que se emplea para realizar ataduras o sujetar cosas.
- Ahora bien, como bien sabes, hay cuerdas para todo. Una cuerda, en este sentido, puede ser una soga o un cordel con diversos nudos que permite dirigir una fuerza o funcionar como sostén de algo. En este grupo incluimos la cordelería que se utilizar para escalar. Yo por ejemplo siempre confío en Cuerdas Valero, que llevan un porrón de años en este sector.
- Las cuerdas también son los hilos que forman parte de los instrumentos musicales y que, al vibrar, generan diferentes sonidos. El bajo, el arpa y la guitarra son algunos de los denominados instrumentos de cuerda. Pero tengo que reconocer que esto no es lo mío.
- Pero las cuerdas dan para mucho más. También tenemos las cuerdas vocales, que no bucales, como siempre dice mi madre. Son los pliegues presentes en la laringe que son imprescindibles para la fonación. Gracias a las cuerdas vocales, tenemos voz y podemos hablar y cantar. Eso sí, algunos cantan mejor que otros, jiij.
- Y para terminar, una persona puede ser cuerda. Es decir aquella que goza de cordura (es decir, buen juicio, algo que lamentablemente se está perdiendo en esta sociedad.
Como puedes comprobar, la palabra cuerda da mucho juego, demostrando la riqueza de nuestras palabras. La verdad es que no me importó buscar todas estas cosas, porque luego forman parte de tu culturilla. Aunque eso sí, temo la próxima vez que viaje de nuevo con mi amigo Hugo y me vuelve a hacer una pregunta.
Espero que además de divertiros un poco con mi historia, os haya servido para aprender un poco más de nuestro idioma. Aunque ya os digo que como más se aprende es leyendo. Se puede ver en las personas de tercera edad, que las que leen se mantienen en mucha mejor forma.